Cuando se realiza la reforma de una vivienda, si por la cocina o el baño, pasan tubos generales de la comunidad, resulta interesante proponer a la comunidad de propietarios para que sustituya las tuberías, siempre que estas sean antiguas.
El ahorro económico que puede suponer para la comunidad, es considerable. Imagina que la reforma está realizada y al de un tiempo se rompe un tubo comunitario. El tener que picar paredes y suelos, cuando la vivienda está recién reformada, supone quitar muebles, cambiar azulejos, baldosas, trabajos de pintura, escayola o carpintería. El coste de la reparación es mucho más cuantioso. Incluso puede suceder que al picar los azulejos, ya no se fabriquen esos azulejos con el color y tonalidad de los originales, y sea necesario cambiar toda la cocina o el baño.
Sin embargo, cambiar las tuberías generales aprovechando la reforma de la vivienda, supone un ahorro muy elevado. Hay propietarios que no ven las ventajas económicas y piensan que si los tubos no están mal, no se deberían cambiar.